jueves, 28 de mayo de 2015

INTRODUCCIÓN A LA TABLA OUIJA






La eficiencia, la credibilidad y hasta los peligros inherentes a la OUIJA, es otro de los temas esotéricos frenéticamente controvertidos a través de la historia. Y no es para menos, dados los recurrentes reportes sobre experiencias catastróficas con este instrumento.

En lo que respecta a la “comunidad científica”, tenemos que insiste y re-insiste en cuanto a que se trata de la conjunción de las voluntades conscientes y/o inconscientes de quienes participan en la sesión.



Es más, se han llevado a cabo experimentos en los que se les vendan los ojos a quienes están participando de una sesión espiritista y los resultados han sido negativos, esto es, que la OUIJA no responde de manera precisa y contundente. Más aún, ni siquiera responde, así sea vagamente.

Sin embargo, son casi que infinitos los reportes de “diálogos espirituales” continuos y coherentes, en las más variadas sesiones con este instrumento espiritual.

Ahora, si los lectores nos apremiasen a formular argumentos más rotundos, les diríamos que este “aparato” ha sido un “instrumento de muerte” para muchos que se han dedicado a jugar con él.

Pero, aún sin plantear hipótesis tan extremas como la que acabamos de presentar, son muchísimos los casos en los que los ataques psíquicos o “espirituales” de las entidades invocadas, han causado verdaderos estragos en la vida de muchas personas.

Otro de los argumentos que esgrimen, reiteradamente, los escépticos sobre la verdadera eficacia de la OUIJA, consiste en que “un simple trozo de madera, con unas letras y un instrumento para posar los dedos, no tiene por qué ser suficiente para atraer a un espíritu determinado.

Veamos, ahora, nuestro concepto sobre este “candente” tema. Si los participantes de la sesión espiritista no se conocen entre sí y, por ende, no cuentan con datos inconscientes y uniformes sobre las consultas que le están formulando a la entidad “invitada”, es claro que la OUIJA está funcionando, siempre y cuando se trate de una sesión extensa, coherente y con respuestas consistentes.

No es necesario ser un genio para deducir lo que acabamos de plantear. Se trata de la más simple lógica elemental. Así las cosas, no es posible aseverar, genéricamente, que la OUIJA funciona, o no, en todos los casos. Todo depende, tal y como lo acabamos de plantear,  de cada caso específico.

Pero, que tiene poder, no existe la más mínima duda. Sin embargo y, precisamente, porque dispone de un poder particular, es necesario tomar toda una serie de precauciones cuando pretendamos utilizar esta herramienta esotérica.


Que no vaya a ser que espíritus de la oscuridad que, incluso, nunca fueron humanos (estamos hablando, para ser claros y explícitos, de espíritus demoníacos) se apoderen del recinto o, peor aún, de las vidas de algunos (o de todos) los participantes en la respectiva sesión. 

LA VERDAD SOBRE LOS EXTRATERRESTRES

Este es uno de los temas sobre los que más se ha escrito y debatido, desde mediados del siglo XX, cuando se presentó el hoy famosísimo “incidente de Roswell”, en Nuevo México.

Sin embargo, existe evidencia fehaciente de que seres inteligentes del espacio exterior, visitaron la tierra desde la antigüedad, según serios estudios que se han llevado a cabo en casi todas las latitudes.

Ahora, de acuerdo con los cálculos matemáticos “más optimistas”, ni aun viajando a la velocidad de la luz, llegarían en un tiempo prudencial desde la galaxia más cercana a la Vía Láctea. Surge, entonces, un interrogante obligado: ¿cómo hicieron para llegar?

Es más: los interrogantes se van desplegando como una suerte de efecto dominó, esto es, que surge uno tras otro como, por ejemplo, ¿llegaron desde hace decenas de miles de años y se quedaron aquí?
O, más bien, vienen y se van constantemente, como si el planeta tierra fuese su casa de recreo o su laboratorio de toda una serie de experimentos insospechados para nosotros?

Existe una tercera opción conceptual, que ha sido acuñada por algunos estudiosos que recurren a la Física Cuántica (o Mecánica Cuántica) y a ciertos principios de la Astrofísica, para sostener que “los extraterrestres han logrado viajar en el tiempo, para arribar a la tierra”.

También, han plasmado una teoría tan temeraria como posible: “que la inteligencia extraterrestre ha logrado encoger el espacio, para poder llegar desde tan enormes distancias”.

En fin y a todas estas, sea cual fuere la teoría a la que nos allanemos, es claro que están con nosotros o, si se quiere, “entre” nosotros desde los inicios de la civilización y, quizás, desde mucho antes.
Los reportes de avistamientos, de encuentros cercanos e, incluso, de abducciones y de interacción sexual, son casi que innumerables, lo que hace que sea indiscutible su existencia, a pesar de la necia insistencia de los escépticos.

De otro lado pero en el mismo orden de ideas, es preciso auscultar las razones de la recurrente reticencia de los gobiernos de las grandes potencias, a manifestarle a la humanidad, de una vez por todas, que existen los extraterrestres.

A este último respecto, digamos que disponemos de una espléndida evidencia: el hoy ex primer ministro de Rusia, Dmitri Medvedev, fue sorprendido manifestándole a una periodista, palabras más palabras menos, que “no es posible sacar este fenómeno a la luz pública, porque el pánico se apoderaría  del mundo entero”.

Adicionalmente, tenemos las declaraciones de un ex primer ministro canadiense, prácticamente que aceptando la existencia de estos seres. En lo que a Chile respecta, tenemos que, desde hace ya casi dos décadas, se creó una agencia estatal para estudiar este fascinante fenómeno.

El intenso debate continuará, quién sabe por cuantas décadas más. En lo que a nosotros respecta, resta con manifestar que, desde este “foro público”, estaremos plasmando nuestros conocimientos sobre este fascinante y hasta atemorizante tema.


EL CARÁCTER ORIENTADOR DEL TAROT



El tarot es mucho más que solo adivinación, como erróneamente lo considera el ciudadano del común. Todos los que recurren al tarotista, con la finalidad de que el Oráculo les devele algo o, bien, con la intención de cambiar su suerte actual, van con un enfoque equivocado.

Aclaremos, eso sí, que el tarot es uno de los medios más serios, eficaces e idóneos de los que disponemos para que un psíquico nos adivine lo que pretendemos conocer. Pero, no es la única finalidad. Veamos el por qué.

Un buen cartomante o, para ser más específicos, un buen tarotista realiza una lectura, luego de la tirada. En medio de dicha lectura, nos irá diciendo muchas cosas, incluso, al margen de lo que le hemos consultado concretamente.

Al contrario de lo que sucede con las Cartas de los Ángeles, en que las preguntas deben ser concretas (nada ambiguas, ni genéricas), el tarot nos muestra determinados caminos que, aparentemente, nada tienen que ver con la consulta subjetiva.

Ahora, es por ello, precisamente, por lo que estamos reiterando, desde un principio, que este Oráculo no sólo es una maravillosa fuente de adivinación de lo desconocido: además, es un “amigo que nos orienta y nos sugiere corregir el camino, de ser necesario”.

Siempre será necesario tener en cuenta que el ser humano es, en sí mismo, el dueño de su propio destino. El tarot adivina y orienta, sí es cierto. Pero, en última instancia, si no acatamos sus directrices (por así decirlo) este maravilloso Oráculo nada podrá hacer para cambiar nuestra suerte.

Hablando en un sentido un tanto figurado, digamos que el tarot se enmarca en una especie de “trilogía”: el Oráculo (el tarot), el experto tarotista (que realiza la tirada y la lectura) y el consultante que es, como la palabra misma lo indica, quien consulta sobre algo que no conoce.

Es, precisamente, a partir de la adivinación, que el tarot nos orienta, tomando al experto como el medio de comunicación. Y, si seguimos sus sabias sugerencias, muy posiblemente cambiará nuestra suerte y todo podrá ir por los caminos de la prosperidad en todos los ámbitos.

EL MARAVILLOSO DON DE LA CLARIVIDENCIA

El don de la clarividencia es, quizás, uno de los fenómenos sobrenaturales más fascinantes que existen. Para ser claros, certeros y concisos, digamos que es la capacidad de “VER CON LA MENTE” lo que el ser humano no puede percibir con las limitaciones propias de los sentidos físicos.

Serán muchísimas las entradas que necesitaremos, para tratar este apasionante tema con la profundidad que merece. Sin embargo y para efectos introductorios, digamos que, en principio, se trata de un don connatural, esto es, con el que SE NACE.

Sin embargo, muchos expertos sostienen que es posible adquirirlo mediante estudio y práctica. La polémica siempre quedará abierta y será bien complejo llegar a una conclusión contundente y definitiva.

Se sabe de algunas escuelas de clarividencia asentadas en algunas regiones Asia e, incluso, de otras establecidas América, más concretamente en los Estados Unidos.

Sin embargo, el asunto no se desplaza, tan solo, en el ámbito del posible aprendizaje en escuelas especializadas. Es necesario enfocar el tema desde otras perspectivas adicionales.

Veamos, entonces. Un experto tarotista que, por ejemplo, no haya nacido con el don de la videncia, de todas maneras tendrá la capacidad de VER CON LA MENTE algunas situaciones del consultante, gracias al Oráculo que está utilizando durante la sesión?

Creemos que sí siempre y cuando, claro está, se trate de un verdadero experto y no de uno más de los miles de “charlatanes” que andan “al acecho” de ingenuos e incautos clientes a los cuales puedan timar, prometiéndoles respuestas imposibles, como imposible es su capacidad de develar lo que está oculto a los sentidos naturales.

Lo mismo podremos predicar de un brujo y/o de un chamán. Cada uno recurre a sus propios Oráculos, para develar lo que le es desconocido al consultante. Pero, ¿tal circunstancia los convierte en clarividentes?

Creemos que todo depende de cada caso específico. Si ese chamán, hechicero y/o tarotista, no nació con el don de manera natural, pero dispone de cierta predisposición a descubrir lo imperceptible por vías naturales, creemos que sí podría adquirir el don de la clarividencia.

Es más: existen casos documentados que, de alguna manera, dan crédito a lo que acabamos de manifestar. Pero, en fin y a todas estas, este subtema específico será el objeto de otras publicaciones. Por lo pronto, continuemos hablando sobre la esencia de lo que es este maravilloso fenómeno.

Se sabe, por ejemplo, que, según documentos históricos originales y desclasificados, en la primera y la segunda guerra mundial se recurrió a los clarividentes, para realizar lo que se ha denominado “espionaje psíquico”, para develar los planes de las filas enemigas.

De la misma forma, en la actualidad se les contrata para develar lo que sucede en el espacio exterior. A estos, específicamente, se les suele denominar “observadores remotos” que, según fuentes serias, trabajan para la NASA y la Agencia Espacial Europea.

Otros de los escenarios en los que son bastante útiles los videntes, es en la búsqueda de personas desaparecidas por extravíos durante viajes, excursiones, montañismo y demás.



También, suelen develar la ubicación de personas secuestradas, de prisioneros de guerra, de terroristas y de todo tipo de delincuentes. Durante futuras entradas, haremos referencia a casos específicos que comprueban todo lo que hemos manifestado hasta acá.

ENTRE TODAS LAS DIMENSIONES




El ámbito de lo paranormal es tan, o más, extenso y complejo que la “dimensión vital” en la que vivimos todos los seres humanos, desde la cotidianidad.
En otras palabras y para ser más claros y explícitos: lo que vemos, oímos, tocamos y experimentamos mediante los sentidos físicos, es reducido si lo cotejamos con el mundo paranormal.
Así las cosas, es necesario precisar que, quienes “no ven más allá de sus narices”, disponen de una experiencia de vida bastante limitada. La experiencia del ser humano, va muchísimo más allá de los que percibimos y sentimos dentro los parámetros normales.
Surge, entonces, un interrogante ineludible a este respecto: ¿cómo, donde, cuando y con quién encontramos acceso a lo paranormal? Si no dilucidamos una inquietud de semejantes proporciones, no será posible acceder a muchos “mundos ocultos a los sentidos” que rodean la vida del ser humano y, de alguna manera, lo afectan, por mucho que no los perciba.
A ciertos tipos de expertos en estos temas, no les agrada el concepto de “Oráculo”, porque lo consideran un tanto “arcaico”, dado que eran conceptos (y realidades) propios de civilizaciones antiguas, como la griega y la romana.
Sin embargo, nosotros consideramos que ello no obsta para que optemos por utilizarlo, por considerarlo un concepto, si se quiere, genérico y que abarca a muchas de las artes y ciencias esotéricas ancestrales, por no decir a todas.

Nuestra titánica tarea será, de aquí en adelante, desentrañar el sentido de todos y cada uno de estos Oráculos, como es el caso de la clarividencia (también llamada “videncia”), el tarot y todas las otras formas de cartomancia, el chamanismo, la hechicería y demás.

ORIGINALIDAD DE LOS CONTENIDOS DE INTERNET

Mucho se ha discutido durante los últimos años, respecto de la conveniencia (o no) de que sean terceros quienes elaboren los contenidos de los sitios web y blogs de internet, por lo que es necesario formular ciertas aclaraciones antes de continuar con la exposición.

En primera instancia, es preciso tener en cuenta que no todos tienen las habilidades que se requieren para escribir correctamente, esto es, atendiendo a los principios de la semántica, la gramática, la ortografía y demás. En tal virtud, debemos ser conscientes de que es necesario admitir que sean terceros expertos, quienes elaboren nuestros contenidos escritos.

El mismo principio, se aplica a la edición de videos: es más que obvio que no todos sabemos hacerlo, en vista de que se requiere de ciertos conocimientos técnicos y de experiencia para tal efecto. Surge, imperioso, un interrogante sobre este particular: ¿Si no tenemos idea sobre cómo editar un contenido audiovisual, tendremos qué hacerlo, de todas maneras, porque es preciso que seamos 100% originales?

La respuesta es, por supuesto, un rotundo NO. Es más, ello iría en detrimento de la calidad de nuestro sitio web o blog. En este orden de ideas, no compartimos (respetuosamente) las opiniones que van en contravía del hecho de que el propietario y/o administrador de un website, delegue  la elaboración de sus contenidos en terceros.

Ahora, el asunto amerita un análisis más profundo: ¿en quién o quienes, estamos delegando esta importante labor? Esta es, si se quiere, la "pregunta del millón". En reiteradas ocasiones, Matt Cutts, alto funcionario de Google, ha manifestado que el "gigante de internet" iba a empezar a penalizar a las que él denomina "granjas de contenidos".

No sabemos si se ha estado refiriendo a todos los sitios que contratan a 15 o 20 escritores "supuestamente" profesionales, para que escriban los artículos que, periódicamente, solicitan los propietarios y/o administradores de las páginas que necesitan contenidos para publicar.   
  
Entonces, si Matt Cutts ha estado haciendo alusión a esta extendida modalidad, creemos que tiene toda la razón. Veamos, el por qué consideramos que está argumentando correctamente. Los escritores de estas tradicionales “Granjas de Contenidos”, NO ELABORAN ARTÍCULOS 100% ORIGINALES, tal y como lo pregonan y promocionan.

Los “escritores granjeros”, toman dos o tres fuentes de información de varios sitios o blogs de internet. Y, lo que realmente hacen, es RECICLAR esas fuentes para escribir un artículo, SUPUESTAMENTE original. Si Google pretende penalizar esta modalidad, estaría en todo su derecho. El reciclaje de contenidos no puede ser aceptado, puesto que se está perdiendo una gran porción de la pretendida originalidad.

Es más, también se está perdiendo calidad. Reciclar varias fuentes, cada una con su propio estilo y su propia esencia, no puede traer como consecuencia un buen contenido o, si se quiere, sería intentar “articular lo inarticulable” (permíntasenos la expresión, que es propia, más no castiza). Surge, entonces, otro interrogante ineludible: ¿de dónde tendremos que obtener las fuentes de información para crear los artículos, si no es del propio internet?

La respuesta es clara y contundente: la Red no es la única fuente de conocimiento porque, si así lo fuese, ya hubiesen desparecido las librerías y las bibliotecas “físicas” y, es ahí, donde radica la esencia de nuestra exposición: si recurrimos a una integralidad de fuentes con bibliotecas, videotecas, hemerotecas e, incluso, el mismo internet (que es ineludible, no lo estamos negando), podremos elaborar contenidos de calidad y, ahí sí, originales “casi” que en un 100%.

Como estarán notando los lectores, ubicamos la expresión CASI entre comillas y lo hemos hecho deliberadamente, dado que siempre será necesario acudir a las fuentes de conocimiento. Nadie tiene “acceso directo al Conocimiento Akáshico”, de tal manera que pueda conocer de cualquier tema y al instante. En fin y a todas estas, hemos plasmado nuestra posición sobre este debatido tema. Mientras tanto, la controversia continuará.